Si lo que buscas para tu armario son unos zapatos de hombre versátiles y con los que combinar con (casi) cualquier prenda de ropa, los zapatos slipper pueden convertirse una solución perfecta para eventos de sport o, incluso, para el día a día.
Nos encontramos con un tipo de calzado que se caracteriza principalmente por la comodidad. Se les llama de esta manera por su parecido a las zapatillas de andar por casa característica de los hombres.
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A pesar de que durante los últimos años se ha vivido un resurgir de este calzado, sus orígenes, según algunas fuentes, se remotan al siglo XV y vivieron una época de apogeo durante el siglo XIX. Los señores de la aristocracia inglesa, después de largos días en sus fábricas o de cacería con sus caballos, al llegar a casa, se desprendían de sus botas, y en un intento de mantener la elegancia (y la limpieza) en sus hogares, estos, solían quitarse las botas de montar a caballo y calzarse un par de cómodas Slippers para estar por casa. Originariamente, este calzado estaba fabricado en tejidos de terciopelo o raso, e incluso llevaban bordados el escudo familiar.
Como curiosidad, la popularidad de este calzado fue tal que el mismísimo Príncipe Alberto eligió unos slippers para contraer matrimonio con la Reina Victoria en 1840.
Los zapatos Slipper para hombre se encontrarían a medio camino entre los mocasines y las bailarinas de mujer, pero con la pala más alta. En las últimas temporadas, se han puesto muy de moda, y los podemos encontrar en una gran variedad de colores, pieles y estampados.
Eso sí, las características principales de este tipo de calzado son sus suelas blandas y finas, sus hormas cómodas y su corte chic y elegante.
En este caso, la clasificación básica de los zapatos Slipper para hombre es mucho más sencilla que en otros tipos de calzado masculino. Podemos encontrar solo dos tipos reconocibles y con nombre propio.
Las Opera Pumps, en la actualidad se hacen en charol negro con unos ribetes de grogrén y un lazo de puesto en la parte superior de la pala, también fabricado en grogrén. Estos dos atributos están añadidos para que combinen con los detalles en seda en las solapas del esmoquin y con la pajarita. Por otro lado, encontramos los zapatos Slippers con el talón cerrado, tienen el nombre del consorte de la Reina Victoria, Albert.
Hoy en día, y a pesar de que las Slippers para hombres todavía se hacen con terciopelo negro, se pueden encontrar en diferentes colores y materiales, siempre cómodos, chic y muy fáciles de poner y quitar.
Una de las mejores maneras de llevarlos es con un look que muestre los tobillos, ya sea con unos vaqueros o con unos pantalones cortos. Al ser un calzado elegante, es preferible que sea la prenda primaria de nuestro outfit; por eso tampoco deberíamos preocuparnos demasiado con las prendas que elijamos si no optar por aquellas normales que nunca fallan como son las camisas y las gabardinas.
Otra forma en la que se pueden vestir es con un traje, preferentemente que sea uno de corte pitillo, y corbata a juego. Los más osados han llegado a relegar los zapatos Oxford a un segundo lugar como calzado formal en favor de los slippers, para aportar un toque original, elegante y trasgresor a los atuendos en eventos formales. Pero como ocurre con otros modelos de calzado formales, antes de tomar esta decisión, se deberá tener en cuenta el diseño, color y materiales, además de la etiqueta del evento y, por su puesto, el resto del atuendo.
En la actualidad, debido a la popularidad que ha adquirido el formato y sus constantes reinterpretaciones, resulta complejo diferencia entre un zapato mocasín y los slippers. Ambos zapatos no llevan cordones y tienen una suela separada del material de la parte superior del zapato.
Se les suele llamar slipper a aquellos zapatos que tienen una apariencia más suave, e incluso desestructura y con menos costuras y adornos. Entonces, los mocasines serán aquellos que llevan borlas, costuras y tienen un acabado algo más rígido.
Como hemos señalado anteriormente, en la actualidad se pueden encontrar slippers en multitud de materiales. En Lottusse apostamos por su fabricación con pieles suaves y fácilmente adaptables al pie, como por ejemplo la piel de canguro, que destaca por su transpirabilidad y resistencia, la convierte en la piel perfecta para un zapato estival.
Desde Lottusse queremos ofrecerte algunos consejos prácticos para el correcto cuidado de la piel del calzado y que te puedan durar impecables durante mucho más tiempo.
Antes de realizar cualquier tarea de limpieza o mantenimiento debes seguir los siguientes pasos: